Por su versatilidad y productividad, el minicargador frontal es utilizado en sectores como la construcción, la minería, el paisajismo, urbanismo y la agricultura, pues se trata de máquinas compactas, potentes y fáciles de maniobrar.
Conocer los distintos tipos y características hará que sea más sencillo identificar la maquinaria y equipo ideal para nuestro proyecto.
Un minicargador frontal es un tipo de maquinaria pesada multifuncional que puede usarse tanto en áreas rurales como urbanas.
Está compuesto por una cabina cubierta y un chasis rígido con un brazo frontal. Posee un sistema hidráulico que permite equiparlo con múltiples accesorios para variadas tareas, como taladrar, zanjar, barrer, entre otras.
Entre sus ventajas destacan su estabilidad y seguridad, capacidad de elevación, así como su eficiente uso del combustible.
Por lo general, los minicargadores frontales son equipos cargadores con una potencia entre 47,9 a 92 caballos de fuerza o hp. Su capacidad de carga depende del tamaño de su brazo, el cual varía según el modelo.
En el mercado se pueden encontrar minicargadores con capacidades de carga desde los 700 kilogramos, siendo los más pequeños, hasta los más grandes que alcanzan los 2000 kilos.
En cuanto a su desplazamiento y mecánica, existen dos tipos de minicargador frontal:
Los minicargadores sobre ruedas son la alternativa ideal para proyectos que se desarrollan sobre pavimento de concreto, grava o asfalto.
Este tipo de máquina, cuenta con modelos más compactos y versátiles. Además, por tener motores más pequeños, emplean menos combustible. Debido a esto, considerando sus dimensiones y velocidad, pueden ser la mejor opción para trabajos de vialidad o como maquinaria minera.
Asimismo, este tipo de maquinaria y equipo tiende a ser más económico al momento de la compra y a la hora de realizar mantenimiento. Por ejemplo, cambiar sus neumáticos es menos costoso que reemplazar las orugas. Sin embargo, su vida útil es menor que un equipo con sistema sobre orugas.
Los microcargadores frontales sobre orugas se recomiendan para labores en terrenos sin pavimento o fangosos.
Por tener una mayor capacidad de tracción, son ideales para excavar en cualquier terreno y estación, o empujar objetos pesados. Estos modelos suelen ser más estables en terrenos inclinados, y tienen mayor capacidad de carga que aquellos que operan sobre ruedas.
Por lo general, tienen más vida útil que los minicargadores sobre ruedas, pero mayores costos de mantenimiento. Entre sus desventajas se encuentran la velocidad y los daños que pueden ocasionar al pavimento si no se utilizan recubiertas.
En JCB encontrarás un modelo más compacto y productivo: el minicargador JCB 155, una máquina ideal para trabajar con mayor productividad y comodidad gracias a su pequeña plataforma de gran capacidad operativa.
Esta máquina posee una trayectoria de elevación radial que brinda alcance y visibilidad. Tiene una capacidad nominal operativa de 703 kg y su brazo frontal carga un volumen de hasta 0,40 m³.
El minicargador JCB 155 posee una potencia de 55 caballos de fuerza, gracias a integrar un motor Perkins 404D de 44.7 kW. Además, ofrece 60% más de visibilidad y un 46% más de espacio en cabina que otros minicargadores.
Es un modelo ideal para ejecutar limpiezas industriales, paisajismos, diversos trabajos de construcción, urbanismos y como maquinaria minera compacta.
Al igual que el resto de los minicargadores JCB, el minicargador 155 brindará a tus proyectos seguridad, rendimiento, comodidad y facilidad de uso. Además, incorpora JCB Livelink, un sistema que utiliza tecnología satelital para gestionar las máquinas de forma remota.
Minicargador 205
Minicargador 270
Minicargador 155